Crítica de una película - Intocables

Los Intocables, una película cuyos directores son Olivier Nakache y Éric Toledano, cuenta la historia de la amistad entre dos hombres que son diferentes en muchos aspectos. Driss, que viene de una clase social más baja, cuida de Philippe, un hombre adinerado, pero tetrapléjico. A lo largo de la película, se les presenta numerosos desafíos, pero su amistad se fortalece y ambos evolucionan espiritualmente.

Esta formidable comedia dramática está basada en una historia real. Entonces, no es difícil identificarse con las figuras principales, y debido a esto emociona mucho.
Los directores logran producir una película muy cautivadora porque el tema principal incita uno a reflexionar sobre la vida. El tema recurrente es la enfermedad y todos los retos que implica. Los actores son muy persuasivos en su trabajo de actuar y logran crear personajes cautivantes de los cuales el público puede compadecerse. Al ver la película, el público siente las emociones que los personajes están experimentando, y esto es lo que crea una película intensa.

Asimismo, la trama de la historia está bien construida. La película empieza con un ‘flash-forward’ dejando al público intrigado de lo que sucedió antes. A continuación, uno está al principio de la intriga dónde Driss et Philippe se encuentran por primera vez. Por lo tanto, la historia se vuelve más complicado y se orienta hacia un clímax, y finalmente termina con un final feliz y optimista. A pesar del tema recurrente triste de la enfermedad, la película tiene muchos momentos divertidos. El mensaje detrás de esto es que debemos mantener una actitud positiva en la vida, no importa lo que nos pasa.

Además, la selección de la música es muy apropiada, ya que las canciones elegidas refuerzan las emociones que los directores querían que el público sienta en momentos diferentes de la película.
La forma en que se utilizan los ángulos de cámara también es muy adecuada. Hay una escena en la que las imágenes son particularmente de gran belleza; es el momento en el que Driss y Philippe están parapente.

En suma, esta es una película muy conmovedora con personajes a los cuales uno se apega. Uno aprende una lección importante después de ver la película: debemos valorar las personas que amamos y no debemos dar por sentado lo que tenemos.